-Hasta
mañana.- me dijo María
-Hasta mañana- le contesté
Todo fue muy rápido. Me introduje en un profundo sueño, mi
chico y yo íbamos de la mano por la senda del bosque. Todo era muy bonito, se
notaba que estaba dormida.
Pasamos al lado de un banco donde nos sentamos. Nos besamos.
Proferí una maldición en voz baja. Ojalá todo esto fuera real.
-¿Qué pasa, Sandra?- dijo mi novio
Y entonces me di cuenta de que no era un sueño…